6.3.13

Oración a Santa Teresa de Jesús Pidiendo a Dios por su intercesión remedie los males de la Iglesia y consuele al Santo Padre Dios omnipotente e infinitamente bueno, que os habéis complacido en derramar con admirable generosidad vuestras luces en el entendimiento y la abundancia de vuestros dones en el corazón de vuestra sierva Santa Teresa de Jesús, para que fuera en tiempos calamitosos una gran lumbrera en vuestra Iglesia, y una victima abrasada en el fuego de vuestro amor, capaz de templar vuestra ira, provocada por los pecados del mundo; por aquel amor ardentísimo que ella siempre profeso a la Iglesia Católica; por aquel celo abrasador que la devoraba por la salvación de las almas; por aquella fe tierna, sencilla, ardiente y animosa con que estaba presta a derramar su sangre por defender vuestra gloria y la de vuestra Esposa inmaculada, la Iglesia, que fundasteis con la Sangre preciosa de vuestro Hijo Unigénito, concede, Señor, paz y prosperidad a esa misma Iglesia. Haced que vuestro reino se extienda por toda la tierra para que en todas partes y por todos los hombres sea vuestro nombre bendecido y glorificado. Proteged con vuestros soberanos auxilios al sumo Pontífice y a todos los que con el defienden la causa de vuestra gloria, y derramad en su corazón el bálsamo divino de vuestros consuelos, para que nos desmaye jamás bajo el peso de la tribulación. Iluminad a los que yerran, convertid a los que os ofenden, salvad a todos los redimidos; vengan todos a formar en la tierra un solo rebaño bajo un solo pastor, para reinar luego todos en el cielo por los siglos de los siglos. Amén.